Algunas personas con cáncer desarrollan el sentimiento de que se merecen lo que están pasando; a otros les preocupa ser una carga para los familiares. Cuando la persona siente que ha causado su enfermedad es conveniente desmentirlo, se debe procurar que la persona con cáncer sienta que quienes le acompañan la cuidan porque es parte de la familia. Si la persona ha desatendido las indicaciones médicas y esto ha agravado la enfermedad, entonces es conveniente plantearle que no es momento de recriminarse, sino de buscar estrategias para mejorar.
La culpa puede sobrevenir también porque la persona quiere seguir atendiendo las necesidades de otros como solía hacerlo y ahora no puede dedicar el mismo tiempo para ello. En este caso, conversa con tu familiar o amigo con cáncer y sugiérele que para poder dar apoyo a otros, primero hay que apoyarse a sí mismo.
La depresión es una enfermedad que resalta porque la persona que la padece tiene un estado de ánimo cercano a la tristeza. Este estado de ánimo está acompañado con otras conductas, como son la falta de apetito, deseo de dormir durante muchas horas, la pérdida del cuidado de la apariencia, apatía con respecto al aseo personal, opiniones negativas sobre su persona y desinterés con los compromisos laborales y académicos.
Recomendaciones
El cáncer es una enfermedad que no sólo está alterando físicamente a un miembro de su familia sino también afecta la forma en cómo se siente, piensa y hace las cosas que siempre ha realizado.
Sugerencias
Es importante que sepas también que una complicación posible en las personas con cáncer es la falta de deseo de comer y en consecuencia, los efectos secundarios de los tratamientos (náuseas o irritación de áreas cercanas a la boca por la radioterapia) pueden provocar aprehensión del paciente en algunos casos. En otras oportunidades, la falta de deseo de comer es producto de alguna depresión y al ser tratada debe desaparecer como síntoma.
Organízate para ayudar a tu familiar o amigo con cáncer: