¿Cómo obtener una alimentación segura cuando recibo tratamiento con quimioterapia?
El cáncer y su tratamiento pueden debilitar el sistema inmune, afectando las células que protegen contra enfermedades. Como resultado de esto, el cuerpo no consigue luchar contra las infecciones, como puede hacerlo una persona saludable. Mientras que el sistema inmune se está recuperando, usted debe evitar exponerse a posibles organismos causantes de infecciones; debe evitar los alimentos que pueden contener un alto contenido de bacterias.
Siga las orientaciones de seguridad para reducir el riesgo de exposición a las bacterias u otros organismos que pueden causar infecciones con síntomas como diarrea, fiebre, vómitos, etc. Si usted tiene un número bajo de leucocitos, debe tener mucho cuidado en la preparación de los alimentos para reducir su exposición a las bacterias.
Consejos para una alimentación segura:
- Lave bien sus manos y los utensilios antes de manipular los alimentos.
- Proteja los alimentos de los insectos.
- Lave las frutas y vegetales con agua potable (en el caso de las hojas, lávelas una por una) antes de quitar la cáscara o cortar. Remójelas en un litro de agua con una pastilla para desinfectar frutas y hortalizas. También puede utilizar vinagre.
- Lave las frutas y vegetales que serán consumidas con cáscara con una esponja suave (separe una esponja solo para este uso), enjuagándolas completamente antes de ingerirlas.
- Consuma las frutas inmediatamente después de ser cortadas. En caso contrario, sus vitaminas se degradan en contacto con el aire o la luz.
- Seleccione frutas y vegetales íntegros. Al preparar retire las áreas dañadas de aquellas que están enteras.
- Lave los envases de alimentos con agua y jabón antes de usarlos.
- Nunca ingiera alimentos con apariencia u olores extraños.
Temperaturas seguras:
- Prepare alimentos calientes a una temperatura mínima de 78ºC y enfríe a temperaturas por debajo de 19ºC.
- Cocine las carnes completamente. No deben permanecer partes rosadas en las carnes. Evite consumir carnes ahumadas.
- Cocine bien los huevos hasta que la clara esté completamente dura y la yema espesa.
- Descongele la carne, el pescado o el pollo en la nevera o en el micro ondas, pero nunca a temperatura ambiente. No congele nuevamente.
- Divida grandes cantidades de alimentos en varios envases pequeños para una refrigeración más rápida. Refrigere en la nevera solo el alimento que será consumido en los próximos 2 a 3 días. Congele el resto.
- No tenga grandes cantidades de vegetales frescos. Compre pequeñas cantidades. Si esto es difícil, congele. Pero al consumir, lleve del congelador directamente al vapor.
- Guarde las frutas y verduras bajo refrigeración (con excepción de las que aún están verdes) o en un lugar fresco y oscuro.
- No deje alimentos perecederos fuera de la nevera por más de 2 horas.
- Mantenga la mantequilla bajo refrigeración en el envase original. Igualmente, evite dejarla expuesta al aire por más tiempo de lo necesario para servirla.
- Guarde los aceites en un armario fuera de la luz y mantenga el frasco siempre tapado. Nunca utilice de nuevo las grasas después de calentarlas.
- Las preparaciones con huevos, cremas, mayonesa y salsas, no deben permanecer fuera de la nevera por más de una hora.
Al momento de comprar los alimentos en los mercados:
- Verifique la fecha de fabricación y la validez del producto. No ingiera alimentos con una fecha de validez vencida.
- Verifique el olor, la presencia de cuerpos extraños, envases dañados y alterados.
- Hierva los alimentos enlatados durante 15 minutos.
- Evite los postres y alimentos salados no refrigerados.
- Si usted come en la calle, tenga cuidado con las condiciones higiénico-sanitarias del local.
- Evite la leche no pasteurizada (de lata o bolsa) y los lácteos no pasteurizados. Utilice leche pasteurizada (de caja).
Evite los mariscos, crustáceos, rosbif, carpacho, comida japonesa, ensaladas crudas, productos no refrigerados, agua que no sea potable, alimentos molidos o rebanados, en locales de procedencia dudosa.