El cáncer y su tratamiento pueden hacer que se resientan las relaciones de pareja, ya que la enfermedad presenta retos para la comunicación, la intimidad y el bienestar sexual de la persona enferma y de su compañero o compañera.
El cáncer afecta a todos los que forman parte de la vida del paciente aunque de diversas formas. La enfermedad puede afectar especialmente a las parejas y hacerles sentir rabia, frustración y ansiedad1-3. También pueden tener que ajustarse a los cambios de papel y responsabilidades como cuidadores principales, y esto puede tener un efecto negativo en la relación. Aunque no existe una fórmula universal para que el paciente de cáncer y su cuidador puedan sobrellevar la enfermedad, hay cosas que las parejas pueden hacer para apoyarse mutuamente durante este difícil periodo1. Por ejemplo, mantener las líneas de comunicación siempre abiertas y dedicar tiempo a hablar de sentimientos y temas difíciles, como el miedo a la recurrencia o problemas financieros, puede ayudar a sobrellevar el impacto emocional4. Algunas parejas también se pueden beneficiar hablando con un orientador u otras personas que han sufrido la enfermedad.
Para muchas personas una de las consecuencias más devastadoras y duraderas del diagnóstico de cáncer es el impacto que causa en la salud sexual y en el bienestar5. Tanto los hombres como las mujeres sufren cambios en la actividad sexual y la sexualidad después del tratamiento oncológico6.
Los hombres, por ejemplo, pueden sufrir cambios físicos en la sexualidad que pueden surgir de daños neuronales producidos por la cirugía o la radioterapia del cáncer de próstata. Los cambios también pueden estar asociados a los efectos del tratamiento (cansancio, dolor y aumento de peso) y pueden contribuir al malestar, producir respuestas emocionales negativas y hacer que el paciente se sienta poco atractivo sexualmente. Solicitar información y asistencia a los profesionales de la salud y a los servicios de apoyo del cáncer puede ayudar a los pacientes a ajustarse a los cambios de la actividad sexual y ayudar a las parejas a renegociar sus relaciones íntimas y su vida sexual.